Esta semana, vuelvo con un nuevo «pequeño rincón» de Madrid, de ambiente distendido y alejado del centro. Que no te engañe el nombre del local, esto no tiene nada que ver con chulapos ni chulapas.
Tiene que ver con el país del café, Colombia.
Cuando uno escucha a un colombiano hablar sobre su país, se hace evidente el tremendo amor que el mismo profesa hacia su propia tierra. La intensidad de este amor aumenta, lógicamente, en la distancia.
Amor por su clima, sus ciudades, sus «pueblitos», playas y montañas, sus calles, su gente… y su comida.
No he conocido a ningún colombiano al que no le apasione hablar de comida, y de «su comida», más aún.
Increíble.
Con tan solo unas pocas mesas, y pegadas prácticamente a la barra, Ricardo y Cristina -un matrimonio que hace unos años decidió emprender con esta pequeña gran aventura-, atienden a todos sus clientes con el mismo amor con el que cocinan los platos tradicionales de su amada tierra y cultura.
En un ambiente tranquilo, cercano, familiar y hogareño, dan vida a todas esas recetas que a alguien de allí -pero que viva aquí-, le traerán recuerdos muy vivos. Porque la comida, al igual que un libro, también puede hacernos viajar y recordar. Con los colores, los aromas y por supuesto, los sabores.
A una madre, madrugando para preparar rápidamente el desayuno de sus hijos antes de irse al colegio, para que se vayan «bien vivos» y con mucha energía. A una abuela en verano, cocinando con sumo placer para todos sus nietos, que han ido a pasar con ella los meses más calurosos del año. A las tías, cocinando para sus sobrinos como si fuesen sus hijos.
Arepas, Bandeja Paisa, y Papas rellenas.
Empanadillas, Sancocho de gallina y jugos de pulpa de la fruta más fresca.
Estas son tan solo algunas de las pocas delicias de las que podrás disfrutar si decides acercarte por allí.
Lo que comimos
Esto fue lo que comimos… esta vez. Voy con frecuencia con mi familia, porque mi mujer y mi hijo mayor son colombianos. Además de lo que pedimos esta vez, también hemos probado otros platos como el tamal y las empanadillas.
Toda la comida es casera, hecha desde cero por ellos mismos.
Siempre tienen a disposición del cliente la salsa ají colombiana, hecha con vegetales -algo picante, porque usan ají o chile habanero- y muy habitual en la gastronomía colombiana. La recomiendo encarecidamente.
No te olvides de pedirla.
- Jugos de mora y guayaba
- Arepa de chócolo
- Arepa de carne mechada de ternera
- Bandeja paisa
- Papa rellena
La Arepa de chócolo está hecha con maíz tierno molido y con queso, al horno. Es un plato que suele disfrutar mucho mi hijo mayor. Aunque puede comerse en cualquier momento del día, yo recomiendo este plato para el desayuno -aún así, nosotros la pedimos para comer- o para merendar.
Deliciosa.
La Arepa de carne mechada, también estupenda. Está hecha con harina de maíz y al horno. La carne de ternera, está guisada con cebolla, tomate y ajo.
La papa rellena, es mi plato estrella junto con la empanadilla de carne. Siempre la pido. Una patata cuyo relleno está hecho con carne de ternera, huevo cocido, zanahoria, alverjas secas, arroz y la misma patata. Al abrirla, puedes echar la salsa ají por encima. Tremendo.
Si vas, que no se te escape, debes probarla.
La Bandeja paisa -también «bandeja montañera»-, un plato fuerte típico de la región de Antioquia, al norte de Colombia. Muy abundante en cantidad y en variedad de alimentos. Si vas con mucha hambre, por un módico precio podrás salir de allí completamente saciado.
Aguacate, chorizo -de Santa Rosa, una región de Colombia-, chicharrón -algo parecido a nuestra panceta, pero con un corte más grueso-, fríjoles, huevo, arroz, una pequeña arepa y plátano frito.
Acompañado de un buen vaso de agua de panela -producto con origen en la caña de azúcar-, fresquita con limón.
Casi nada.
Los jugos de mora y guayaba también estaban estupendos, nada parecido a lo que puedas encontrar por ahí o a los zumos que suelas beber habitualmente.
También debes saber que…
- Chulapas Café es una estupenda opción para conocer la gastronomía colombiana -si todavía no la conoces-, con recetas y platos tradicionales hechas con mucho amor y cariño, y eso se nota.
- Es un lugar pequeño, algo escondido y situado en el Centro Comercial Alcalá Norte.
- El precio medio por persona puede variar mucho -dependiendo de lo que pidas-, pero es accesible para todos los bolsillos. De 10 a 20 euros sería lo aproximado.
- Puedes ir a desayunar, a comer y a cenar, pero también puedes comer algo entre horas.
- Los miércoles y sábados, podrás probar la bandeja paisa. Los sábados, también podrás probar el sancocho de gallina, una sopa típica de Colombia.
Te dejo su dirección y su perfil en redes sociales:
Centro comercial Alcalá Norte
Calle Alcalá, 414, 28027 Madrid
¿Conoces algún otro sitio de gastronomía colombiana que merezca la pena? Qué prefieres, los sitios pequeños y familiares… ¿o grandes y bulliciosos?
Delicioso, he ido varias veces pues las papas rellenas y la comida latina estan de maravilla…. Tienen que ir a disfrutar este pedacito de Colombia en Madrid.
Menudas papas, esas no me las pierdo. A la vuelta de las vacaciones me paso seguro!
Hola, Arturo
¡no deberías! 🙂
¡Un abrazo!
Tiene una pinta estupenda y no muy lejos de mi casa, algún día me pasaré a probarlo. La Arepa de carne mechada y la papa rellena me han llamado la atención.
Hola, Juanan
desde luego, tienes que probarlo. Ya me dirás que te parece.
¡Un abrazo!